viernes, 29 de octubre de 2010

Una sonrisa, felicidad para un día

Cuando vi esta foto, no pude evitar no sonreir, se contagia en seguida.

Objetivamente: Es la imagen de siete niños inmigrantes, algunos de ellos con una computadora portátil o bueno como le dicen ahora, una laptop.
Están vestidos con ropa sencilla y humilde, pero aparentemente limpia y sin huecos. Todos tienen sweteres, por lo que no debe ser verano. Se encuentran en una pequeña sala, parece ser de un colegio o alguna asociación de acogida quizás.

Subjetivamente: Me parecen particularmente graciosas sus caras, expresan tanta inocencia y alegría al mismo tiempo que da gusto verles. Además, me recuerdan a los niños de mi pueblo, con los cacheticos rojos del frío y con esa sonrisa especial que los caracteriza.
Estos niños, a pesar de haber vivido seguramente en unas condiciones muy precarias, se nota que son felices, porque sólo necesitan un pequeño detalle de la vida para alegrarles cada día, y con eso ellos se conforman, me parece una manera de vivir muy pura y humana.
Siempre estamos diciendo que hay que educar a los niños, pero a veces no nos damos cuenta de que en muchas ocasiones son ellos los que nos pueden dar lecciones de vida muy importantes.
En esta imagen están con una laptop y, aunque no tienen una para cada uno están todos felices y se ve que la comparten con mucho gusto, están contentos y alegres todos juntos disfrutando de su nuevo juguete, que seguramente no sepan ni utilizarlo.
Su mirada es totalmente transparente, en algunos hasta denota curiosidad por todas las cosas nuevas que están viviendo en un país totalmente desconocido para ellos, pero como siempre se ha dicho los niños siempre son los que más fácilmente se adaptan.

¿ No deberíamos fijarnos más en esos pequeños detalles que nos regala la vida y no en las cosas materiales que nuestra sociedad nos mete por los ojos?


Una oportunidad, una esperanza


Objetivamente: Como podemos observar, aquí vemos la imagen de mujeres inmigrantes trabajando en la empresa de anafe.
Hay ocho mujeres, vestidas con un uniforme blanco, que consta de una especie de delantal y de un sombrero para poder trabajar con la mayor higiene posible. Se trata de una empresa que realiza un servicio relacionado con alimentos, en esta imagen específicamente aparecen rodajas de salchichón, las cuales están pesando.

Subjetivamente: Su procedencia es muy distinta, sin embargo ahí están todas unidas, para lograr un mismo cometido. Por la forma como están dispuestas dichas mujeres, parece que la que porta las rodajas de salchichón está enseñando al resto la forma de trabajar que tienen en dicha empresa, por lo que todas están muy atentas, y con los ojos bien abiertos para poder aprender lo más rápido posible.  
Se puede leer en los ojos de algunas las ganas que tienen de empezar a trabajar y de comenzar a ganarse el pan de cada día. Para ellas es una oportunidad única de realizar una labor digna y honrada, y de una oportunidad en otro país con una mejor calidad de vida.
Algunas tienen expresión de alegría por estar trabajando en una empresa en un país desarrollado como éste, otras de miedo por el hecho de que supone un reto muy grande en su vida, ya que quizás nunca han trabajado fuera de casa.
Pero lo que las caracteriza a todas es ese afán de superación y dedicación al trabajo como llevan seguramente haciendo toda su vida, sólo que en un país y empresa nueva.
Se trata de una pequeña chispa de esperanza y felicidad como ciudadanas que son de este mundo.

¿ Qué sería de ellas si no se las recibe con alegría y hospitalidad?


Un futuro incierto

 Últimamente sólo veo inmigrantes en la calle, Madrid está plagado, y veo tantas caras y rostros que me sugieren y me dicen tantas cosas, que he buscado algunas fotos de inmigrantes para describirlas y preguntarme realmente qué conlleva serlo. Las describiré objetiva y subjetivamente.

Objetivamente:Aquí nos encontramos con una imagen de unos inmigrantes, todos hombres, apilados contra una pared, delante de dos policías de la Guardia Civil.
Dichos hombres se encuentran en un estado acusado de precariedad, sus ropas están manchadas y algunas rotas. Además algunos de ellos están tapados con cobijas, las cuales también se nota que son viejas. Algunos están acostados y otros están sentados, son un grupo grande, puede que haya unos treinta en total.
Los policías tienen una actitud distante, ya que tienen los brazos hacia atrás y están de pie mirándoles. También es importante la presencia del carro de la Guardia Civil.

Subjetivamente: Aparentemente, parece que los tienen recluidos contra la pared y que les están haciendo algunas preguntas pero muy generales, da la sensación de que están esperando a recibir órdenes de qué deben hacer, pero lo más seguro es que los deporten a su país de origen.
La expresión corporal de algunos da que pensar, algunos están sentado mordiéndose las uñas, otros están con la cabeza apoyada en una mano, que exterioriza preocupación, otros tienen la mirada perdida al suelo y unos pocos están acostados como si no tuvieran miedo y estuvieran simplemente a la espera de lo que les ocurrirá
Me parece una foto muy dura, ya que se trata de unos hombres habitantes de este mundo, cuyo propósito de mejorar su calidad de vida está en veremos. Lo que decidan hacer con ellos marcará tanta diferencia que casi no saben si vale la pena preocuparse por algo ante lo que no pueden luchar, o estar tranquilos pensando que han hecho todo lo que han podido.

¿ Qué se puede hacer para evitar estos atentados contra la libertad?


Nuestro primer encuentro con los españoles

Ya me estoy acostumbrando a la forma de ser que tienen los españoles en general, que a veces parece que están bravos, pero en realidad están incluso contentos jajaja. Lo cierto es que no esperaba esto, allá nosotros siempre vemos a España como un gran país en Europa y ahora que estoy viviendo aquí me doy cuenta del montón de problemas que tiene, aunque claro, comparándolo con Venezuela esto es un paraíso.
El hecho de que siempre hayamos visto a España como una gran potencia se remonta a cientos de antepasados, ya que España fue quien conquistó nuestro continente, fueron los primeros que nos encontraron, y nosotros creyendo que eran unos dioses que venían nos opusimos muy poco a su llegada.
Por esta razón, y por el hecho de que los españoles no fueron tan invasivos como los británicos en su conquista; los españoles nos conquistaron rapidísimo, y casi sin darnos cuenta nos estábamos mezclando con ellos y estábamos aprendiendo su lengua, ya que sí es cierto que impusieron su lengua y su religión. Sin embargo, gracias a Dios, nosotros también conservamos muchas costumbres, sobre todo las poblaciones indígenas que aún hay muchas en Venezuela.
Para nosotros, España significa muchas cosas, porque de ellos aprendimos mucho, y aunque también fueron crueles, motivados por su ambición y nos robaron muchísimas riquezas, como en cualquier conquista; nosotros los sudamericanos no pensamos negativamente de España, eso pasó hace mucho tiempo.
Lo que a mí particularmente no me parece bien fue que impusieran su religión y no dejaran que nosotros siguiéramos cultivando nuestra cultura indígena, la cual es muy interesante. Sin embargo, forma parte de la historia de nuestra tierra y también nos ha ayudado en muchos sentidos, ya que había ciertas costumbres de aquella época en nuestra sociedad, que ahora mismo las pienso y me parecen una aberración. Además, dicha conquista ayudó también a que proguesáramos en muchos sentidos.
Y lo importante es que los países de Sudamérica consiguieron independizarse, luchar por su propio país y seguir su propio camino, mezclando ya ambas culturas y construyendo un futuro mejor.
Incluso nuestro nombre se lo debemos a España, les recordamos a Venecia cuando llegaron a una zona de Maracaibo donde hay unos palafitos parecidos a las casas sobre el agua que hay en Venecia, y de ahí salió el nombre de Venezuela.

¿ Qué habría ocurrido si hubieran sido los sudamericanos los que hubieran llegado a España?

Feliz por estar aquí

Me parece realmente increíble cómo puede estar haciendo tanto frío, yo vivía en la montaña y más o menos estaba acostumbrada , pero no es así; aquí no se puede ni salir a la calle. Al margen de lo del frío que me está pegando mucho, tengo una gran noticia, y es que por fin tengo trabajo!!
Después de mucho buscar, me han dado trabajo en el dunkin´ donuts cerca de Sol, estoy muy contenta, voy todas las mañanas, y algunos fines de semana. Así que me está yendo todo super chévere, porque no era fácil encontrar trabajo para una inmigrante como yo en estos tiempos de crisis.
Siento que todo va a salir muy bien, y que voy a salir adelante, para poder aspirar así a una mejor vida. Porque los españoles se podrán quejar todo lo que quieran, pero realmente aquí se vive muy bien; uno puede salir a la calle super tranquilo que nadie le va a robar, por lo menos no a la cara como lo hacen allá, ni nadie le va a poner una pistola en la cabeza.
 Aquí te pueden robar, la diferencia está en que es algo esporádico, no como allá, que todo el mundo tiene una historia que contar, en mi familia por ejemplo ya hemos pasado más de un susto por robos de carros o incluso por intento de secuestro, la verdad es que es muy triste cómo un país como Venezuela, tan bello y tan rico sufre tanto, y lo peor es que el gobierno no hace nada por solucionarlo.
Si pudiera hacer algo por solucionarlo..., y lo peor es que encima siento cargo de conciencia porque en vez de haberme quedado en mi país luchando para que salga adelante con el resto de mi gente, me he venido para acá buscando un futuro mejor, pero para mí, no para mi país.

¿ Qué podría hacer para ayudar a mi país desde aquí?



viernes, 22 de octubre de 2010

La mudanza definitiva

Ya llevo casi un mes en España, parece mentira...Aunque si es cierto que ya me voy adaptando mejor, por lo menos ya he conseguido una habitación en un piso en el centro de Madrid, es chiquitico pero más que suficiente para mí. Además está en una zona que me llama mucho la atención, hay gente de todo tipo, es muy dinámica y la verdad es que es imposible aburrirse.Hay muchas tiendas curiosas y bares (como le dicen aquí). Otra ventaja que tiene es que está en pleno centro, por lo que voy a casi todo caminando, algo que también me parece super curioso, ya que en mi país la gente de ciudad no camina nada, para todo usa el carro. Yo, lo que pasa es que como vivía en la montaña pues estoy acostumbrada.
Eso sí, estoy muy cansada de madrugar porque estoy buscando trabajo, de momento estoy viviendo gracias al sustento que la amiga de mi tía me está dando pero ha habido algunos días que ni siquiera he comido porque me da mucha pena pedirle más dinero, necesito un trabajo YA!
 La verdad es que está siendo muy duro, la gente no es tan amable como en mi pueblo, todo el mundo se ocupa de lo suyo y da la sensación de que cada uno vive en una burbuja a la que sólo pueden acceder aquellos que los conocen. Me estoy dando cuenta de muchas cualidades que tenemos los venezolanos que me parecían muy normales, y ahora las extraño; cuando veo a un sudamericano, inconscientemente intento escuchar cómo habla a ver si tengo suerte y me encuentro con un venezolano porque de verdad que se necesita escuchar ese acento que te traslada aunque sean 15 minutos a tu lugar de origen, y por supuesto comer esas delicatesen que nuestra querida tierra nos brinda.
Sin embargo, a pesar de toda la nostalgia que me embarga cada vez que me pongo a pensar sobre todo en mi familia y mis amigos, aquí me siento feliz, cada día tengo un reto, y me siento viva y comprometida conmigo misma, para crecer tanto profesional como personalmente; no todo el mundo tiene esta oportunidad y yo la voy a aprovechar como nadie.

¿Alguien sabe de alguna tienda o restaurant donde estén buscando empleados?

viernes, 8 de octubre de 2010

Imposible is nothing!!

Ante todo me presentaré, mi nombre es Roxana Valles Soler.
Tan sólo llevo 2 semanas en España y parece que llevo 2 días, el ritmo de vida aquí es demasiado rápido. A pesar de que los días son muy largos, tengo la sensación de vivir un cortísimo sueño, ya que aún no me lo creo del todo...
Os explicaré mi situación, tengo 17 años y estoy estudiando enfermería en la Complutense, lo cual ha sido mi sueño desde pequeñita. Yo soy de Apartaderos, es un pequeño pueblo de Mérida (Venezuela).

Allá es todo muy distinto, se respira otro aire, es algo inexplicable. Aunque yo siempre he sido muy feliz allá, me llamaba la atención salir y conocer nuevos sitios y nuevas costumbres; y estudiar en un país europeo siempre ha sido mi mayor ilusión. Ahora que estoy aquí me doy cuenta de que no todo es un cuento de hadas, la vida aquí es muy dura, se necesitan muchas cosas para vivir que la misma gente se impone.
En este momento estoy viviendo con una amiga de mi tía en Ocaña, por lo que necesito urgentemente buscar un piso en Madrid porque tardo 2 horas en llegar a la Universidad. Además necesito un trabajo, para poder mantenerme, todo aquí es muy caro. 

Me está costando mucho trabajo adaptarme, sin embargo lo conseguiré, cuando deseas algo con todas tus fuerzas y luchas por ello, simpre se consigue; al menos eso fue lo que me dijeron siempre en mi familia.

¿Alguien sabe de una habitación más o menos barata en Madrid?